miércoles, 10 de agosto de 2011

Vida después del nacimiento.


En el vientre de una mujer embarazada estaban dos criaturas conversando, cuando una le preguntó a la otra:

-¿Crees en la vida después del nacimiento?
La respuesta fue inmediata:
Claro que sí. Algo tiene que haber después del nacimiento.
Quizás estemos aquí porque necesitamos prepararnos para lo que seremos luego.
-Bobadas, no hay vida después del nacimiento! ¿Cómo crees que sería esa vida?
No lo sé exactamente, pero posiblemente habrá más luz que aquí.
Tal vez caminemos con nuestros propios pies y comamos con la boca.
-Eso es un absurdo! Caminar es imposible. ¿Y comer con la boca? Es totalmente ridículo! El cordón umbilical es lo que nos alimenta.
Yo solamente digo una cosa: la vida después del nacimiento es una hipótesis definitivamente excluida – el cordón umbilical es muy corto.
En verdad, creo que ciertamente habrá algo.
Tal vez sea un poco diferente de lo que estamos habituados a tener aquí.
- Pero nadie vino de allá, nadie volvió después del nacimiento.
El parto apenas encierra la vida. Vida que a final de cuentas, es nada más que una angustia prolongada en esta absoluta oscuridad.
Bueno, yo no sé exactamente cómo será después del nacimiento, pero con certeza, veremos a mamá y ella cuidará de nosotros.
-¿Mamá? ¿Tú crees en la mamá? ¿Y dónde supuestamente estaría ella?
¿Dónde? En todo alrededor nuestro!
En ella y a través de ella vivimos. Sin ella todo eso no existiría.
- Yo no lo creo! Yo nunca vi ninguna mamá, lo que comprueba que mamá no existe.
Bueno, pero a veces, cuando estamos en silencio, puedes oírla cantando, o sientes cómo ella acaricia nuestro mundo. ¿Sabes que?
Pienso, entonces, que la vida real solo nos espera y que ahora, apenas estamos preparándonos para ella...


Anónimo 4-5-2012